lunes, abril 06, 2020

Dedo Guía en la Forma de Mano de Tai Chi Chuan


Cuando se realiza la forma, hay numerosas posturas donde la mano la tenemos abierta y se nos enseña que el dedo índice de la mano debe de sobresalir del resto. Debemos de intentar que este saliente no se realice con excesiva tensión y rigidez. A continuación vamos a mostrar a grandes rasgos los aspectos más importantes de este capítulo.
Como su nombre nos indica, el dedo guía nos ayuda para tomar como referencia la marca y estabilidad donde tenemos que poner nuestro brazo, mano, cintura, peso de nuestros pies tanto en la Forma como en el Tui Shao y otras situaciones. Aunque parezca raro, en los atrapes también podemos aplicar este principio, ¿por qué?. Un ejemplo puede ser:
si cogemos el brazo de nuestro adversario con nuestra mano y le aplicamos presión con los cinco dedos, éste tiene una referencia de nosotros, siente nuestra fuerza y en cualquier momento nos puede controlar. Sin embargo, si aplicamos el principio del dedo guía, le tenemos sujeto con nuestra mano y los cuatro dedos - excepto el dedo guía- le controlamos a través del tacto, y ante cualquier modificación o cambio de su estrategia podemos soltarlo, deslizar nuestra mano, cambiar nuestra postura de Tai Chi….
Para las personas que tienen problemas en las manos como: pérdida de la fuerza de la mano, dedos engarrotados, falta de riego sanguíneo y de sensibilidad, etc., le ayudará a recuperar esa fuerza que tenía, poder extender los dedos, recuperar y aumentar la fluidez del riego sanguíneo en la mano. ¿Cómo es posible?. Durante las distintas posturas y encadenamientos que se trabajan en la forma se realizan múltiples articulaciones; ejercemos extensiones y contracciones; masajes internos y externos; respiraciones lentas y profundas; y otras funciones que nos ayudan a recuperar la actividad de las manos gracias a la restauración de la movilidad de nuestros dedos. Tenemos que observarnos cómo los extensores y flexores están trabajando; cómo nuestros tendones recuperan la lubrificación que les faltaba y recuperamos sus funciones; cómo nuestros cartílagos realizan correctamente su trabajo así como los ligamentos; cómo nuestra muñeca se vuelve cada vez más móvil; cómo nos vuelve ése tacto perdido y comenzamos a sentir un pequeño hormigueo en nuestras manos; y hay más detalles que cada uno los debe de analizar y sentir ayudándose, bien a través del estudio, de otra persona o por sí solo.
       

No hay comentarios: